Crítica de José Donayre sobre la primera edición |
domingo, 18 de enero de 2015
Golpiza iluminadora
domingo, 11 de enero de 2015
Un vistazo rápido a la producción literaria de 2014 en Arequipa
Segunda Edición (2014) a cargo de Legisprudencia.pe |
viernes, 5 de agosto de 2011
El infierno interior
miércoles, 20 de octubre de 2010
Reclusos y Marginales
Los cuentos reunidos por Orlando Mazeyra (Arequipa, 1980) en su libro La prosperidad reclusa (Cascahuesos Editores, 2010) se desarrollan en los ámbitos urbanos más extraños: manicomios, cárceles, prostíbulos, claustros de conventos. Y en ellos encontramos a personajes marginales (“los verdaderos outsiders del siglo XXI” los ha llamado el escritor Jorge E. Benavides) viviendo las aventuras más insólitas, incluyendo a un coleccionista de perchas de hotel desesperadamente enamorado de su propia hermana.
Así, atisbando en las grietas de una sociedad no muy moderna (que se identifica reiteradamente con la de la ciudad de Arequipa) Mazeyra encuentra, en estos 23 relatos, abundante material sobre lo absurdo y sombrío de la existencia humana.
Y lo expresa en un lenguaje bien trabajado, en el que se hace evidente la exploración de diversos registros, desde el coloquial hasta el (algunas veces recargadamente) libresco. Esa diversidad se puede comprobar hasta en los autores citados: Calamaro, Fito Páez, Bukowski, Goethe y Coetzee.
Cuando todos esos elementos logran integrarse, Mazeyra nos estrega buenos cuentos, como en los casos de “El faquir y la equilibrista” y “Tras la puerta”. Pero algunos relatos se pierden en la búsqueda del efectismo a través de lo sórdido, lo insólito, lo retorcido y, en los casos de textos protagonizados por escritores (algunos por el propio autor), del malditismo. De todas maneras, La prosperidad reclusa, segundo libro de Mazeyra, confirma a este narrador como un autor de interés.Se pueden leer otros comentarios en el blog del libro.
Javier Ágreda
Diario La República.
Lima, 21 de junio de 2010
lunes, 21 de junio de 2010
Los cuentos de Orlando Mazeyra Guillén
Quisiera destacar dos aspectos en los cuentos de Mazeyra: la caracterización psicológica de los personajes y el manejo de la trama narrativa. El autor arequipeño sabe delinear los contornos de la personalidad de los protagonistas de cada historia; además, hace que el lector mantenga el interés por el desarrollo de los sucesos. Mención especial merece la musicalidad de la prosa que evidencia un trabajo de relojería con el lenguaje. En fin, un libro que merece ser leído con atención y que augura un estilo personal en el concierto de la narrativa peruana contemporánea.
(*) Miembro de número de la Academia Peruana de la lengua. Esta reseña ha sido tomada del blog La soledad de la página en blanco de CFC.
lunes, 5 de abril de 2010
Narrativa arequipeña: "La prosperidad reclusa" de Orlando Mazeyra
AB INITIO
Mazeyra Guillén, dedicado a la narrativa a tiempo completo, concibe historias que retratan el espíritu juvenil de la delicada y compleja época que nos toca vivir, los problemas de anorexia, escarceos femeninos, infidelidades, descubrimiento sexual, rasgos obsesivos, depresiones sociales, angustias existenciales, la escritura, donde el alcohol y las drogas son estímulos pasajeros de temer.
Orlando Mazeyra nos presenta un desafío en la nueva narrativa hispanoamericana, su marcado y crudo naturalismo con que presenta sus relatos nos ponen al frente de una realidad marcada por los problemas actuales que conocemos, pero preferimos no ver o vemos y preferimos desconocer. Aunque algunos relatos juegan con el buen juicio del incauto lector resulta necesario abrir nuestra mente para socavar el fondo del asunto propuesto.
CÁLAMO CURRENTE
De cronista deportivo con vitalidad increíble, Mazeyra se encontró con La casa verde de Vargas Llosa, El extranjero de Camus y El túnel de Sábato que cambiaron su vida, su trajín universitario lo envolvió a la literatura como “una forma virtual de alterar el mundo real tanto como el autor y tú (tus tabúes, tus pudores, tus insatisfacciones) lo permitan”.
Por otro lado, la imagen del abuelo, un destacado maestro y docente universitario que, sobre todo, en sus años juveniles quiso plasmar, en sus muchos cuadernos de apuntes, historias en base a sus múltiples lecturas (historia, poesía, filosofía, medicina, zoología, religión, etcétera). El abuelo fue un lector omnívoro e interesado por muchas ramas. Aún Orlando conserva el borrador de un inacabado libro de relatos con un título precioso: Al caer de las tardes. Se presume que, al caer de las tardes, el abuelo garrapateaba con anotaciones ese cuadernos y, de esta forma, procuraba ser un escritor que, si bien no publicó ninguna obra de ficción, escribió artículos e investigaciones en diversos medios periodísticos de la ciudad.
MAZEYRA, EL ESCRITOR
Orlando Mazeyra Guillén (Arequipa, 1980) estudió en el Colegio De La Salle y en la Universidad Católica Santa María, en el 2007 publica su primer libro de relatos “Urgente: Necesito un retazo de felicidad (Bizarro Ediciones, Lima)”. Con “Todo comenzó en la Universidad” ganó el Primer Premio Nacional Universitario Nicanor de la Fuente (2003), organizado por la Universidad Pedro Ruiz Gallo de Lambayeque. Sus cuentos han sido premiados en Morelia, México; en el Primer Certamen Literario Axolotl de Buenos Aires, Argentina. Ha publicado en diversos diarios impresos y revistas literarias virtuales a nivel nacional e internacional. Varios de sus relatos han sido seleccionados por el Proyecto Sherezade (Canadá). Otras de sus producciones aparecen el Proyecto Quipu que promueve el crítico Gustavo Faverón y en la bitácora Gambito de Peón del escritor Ricardo Sumalavia. Su segundo libro, “La prosperidad reclusa”, apareció a finales del año 2009.
sábado, 27 de febrero de 2010
«GOLPIZA ILUMINADORA», reseña en Caretas
Bajo el título «Golpiza iluminadora: cuentos de Mazeyra reunidos como un obligado ajuste de cuentas», aparece en la edición 2118 de la revista Caretas, una reseña de José Donayre Hoefken sobre La prosperidad reclusa.
Para leer la reseña completa hacer clic sobre la imagen.